Satisface las necesidades humanas en la consideración de un espacio habitable, tanto en lo tecnológico como en lo estético.
Proyecta soluciones estimando aspectos como la funcionalidad con el objetivo de buscar la eficiencia, comodidad y armonía en la buena distribución de cada espacio a construir.
Se realiza a partir de un adecuado balance entre las funciones propias que un material pueda cumplir.
El diseño estructural debe siempre de obtener un rendimiento entre la parte rígida y plástica de los elementos para evitar fallas en la estructura por el exceso u omisión de algunos de estos.